En la Conferencia Internacional de la Sociedad Torácica Americana que se celebró hace poco en Denver (Colorado, EEUU), un grupo de investigadores presenta nuevos datos al respecto
El 80% de los niños asmáticos tiene algún tipo de alergia. Asà como en España las más comunes son al polen, al huevo y la leche, en EEUU la preocupación tiene que ver con los cacahuetes (o manÃs), muy presentes en su alimentación. Por este motivo, son varios los equipos cientÃficos que indagan para encontrar posibles casos ocultos detrás de la sintomatologÃa del asma infantil.
En la Conferencia internacional de la Sociedad Torácica Americana que se está celebrando estos dÃas en Denver (Colorado, EEUU), un grupo de investigadores presenta nuevos datos al respecto. Tras analizar a 1.517 niños con asma de una clÃnica pulmonar pediátrica en el Hospital infantil de la Misericordia en Toledo, Ohio (EEUU), observaron que más de la mitad mostraba sensibilidad al cacahuete (66%), 44% (665) dio positivo en un análisis de sangre (para detectar los anticuerpos IgE) y 22% (148) en una prueba cutánea.
Los autores explican, además, que en casi 50% de los casos, ni estos niños ni sus familias sospechan de dicha alergia. «Los sÃntomas se camuflan», puntualiza Robert Cohn, uno de los responsables del artÃculo. «Muchos de los sÃntomas respiratorios que produce esta alergia pueden parecerse a los que ocasiona el ataque de asma, y viceversa». Por ejemplo: dificultad para respirar, sibilancias y tos. Dadas las semejanzas, «el objetivo de este estudio era evaluar la proporción de niños asmáticos que también demostraban sensibilidad a los cacahuetes», para asà poder valorar la pertinencia o no de realizar pruebas de sensibilidad a este fruto seco a los niños con asma.
Sensibilidad no es alergia
Tanto el análisis de sangre como la prueba cutánea informan de que «puede haber una sensibilización. De ahà a que tenga alergia, la diferencia es enorme», puntualiza Silvia Sánchez GarcÃa, alergóloga del Hospital Niño Jesús de Madrid. DeberÃa ser el alergólogo quien certifique la alergia a través de la prueba de la provocación en la consulta. Por esta razón, conviene interpretar los resultados con «cautela», especialmente en España, donde la prevalencia de alergia a los frutos secos en general es de menos de un 1% y, concretamente al cacahuete es muy rara.
Dados los datos del estudio, de los 1.517 niños, 11% (163) estaba diagnosticados con seguridad (por historia clÃnica) de alergia al cacahuete. Ese 66% de los menores que presentaba sensibilidad a este fruto seco «podrÃa no desarrollar la alergÃa nunca», argumenta la especialista española al comentar este trabajo.
Lo cierto, continúa la alergóloga, es que el 80% de los niños asmáticos tiene algún tipo de alergia, bien a la comida o ambiental. Las más comunes en España son al polen (diferentes tipos en función de la zona geográfica), al huevo, a la leche y al pescado. Teniendo en cuenta el componente alérgico en esta parte de la población y que su asma es más grave, «sà serÃa recomendable que a los niños asmáticos les viera un alergólogo para ver si tienen alguna alergia que pueda desencadenar una crisis de asma», señala la doctora Sánchez.
*Publicado originalmente en elmundo.es.
http://www.elmundo.es/salud/2015/05/18/5558ad10e2704e3d628b457d.html