Cuando vemos Los Próximos Tres DÃÂas percibimos que no se trata solo de la versión estadounidense de la pelÃÂcula francesa Por ella (2008), de Fred Cavayé, sino una manifestación pública de incorrección ciudadana, según el punto de vista del guionista y director Paul Haggis. Su historia lo revela todo. John Brennan, profesor de literatura en una universidad de Pittsbourg, está dispuesto a todo para evitar que su esposa Lara pague una condena en prisión por el supuesto asesinato de su jefa. Desde las apelaciones legales hasta la acción deliberada de rescatarla de la cárcel. Buena parte de las dos horas de proyección está dedicada a observar el proceso de transformación de un hombre que decide colocarse al margen de la ley y quemar las naves para lograr su objetivo. Como en sus pelÃÂculas anteriores â€â€Crash (2004) y particularmente La conspiración («In the Valley of Elah», 2007)â€â€, en The next three days Haggis declara su poca confianza en la justicia de su paÃÂs. Por eso su personaje toma una decisión extrema.
Russell Crowe interpreta con solidez a este hombre que pasa del pensamiento a la acción, de una reflexión sobre El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha a los cÃÂrculos de la violencia de la ciudad de Pensilvania. Es un proceso personal vivido hacia el interior de sus dudas. John es capaz de entender la depresión de su esposa y también de empuñar un arma y accionarla sobre un narcotraficante. La primera mitad del film transcurre de una forma muy introspectiva. Se corresponde con la planificación de su rescate. En la segunda estalla la acción. Su fe en la inocencia de Lara parece a ratos un asunto religioso que lo conduce a manejar situaciones casi inverosÃÂmiles. Las instituciones de la justicia no le brindan opciones, asàque hace justicia por su propia mano. Menudo tema.
La narración comienza con el tÃÂtulo «los últimos tres años». A medida que avanza la historia surge otro tÃÂtulo: «los últimos tres meses». Cuando se desarreolla el conflicto y avanza hacia su resolución surge el tercer tÃÂtulo: «los próximos tres dÃÂas». La acción se resuelve en setenta y dos horas.
Más allá de la trama de suspenso se encuentra la obsesión de ese hombre pacÃÂfico y familiar que lo conduce a cometer varios crÃÂmenes en su intento por lograr justicia para Lara. El guión de Haggis dedica su tiempo en presentarnos a los personajes con paciencia. De varias manera justifica sus acciones y no las juzga. Logra que el espectador se identifique con su protagonista y acepte sus circunstancias y decisiones. Algunas escenas se expresan en sàmismas y ni siquiera requieren de diálogos, como el encuentro de John y Lara en la cárcel cuando saben que no hay apelación legal posible. En otras las palabras son fundamentales, como cuando John traslada en su auto a un delincuente malherido que suplica por su vida. El relato mantiene el interés con un ritmo creciente que conduce hasta la fuga convertida aquàen una trepidante persecución que funciona como una historia en sàmisma.
Russell Crowe expresa de manera convincente la crisis de su personaje, desde la determinación a la obsesión, del miedo al coraje, de la frialdad a la desesperación, con una simple mirada o con un gesto, pero también con sus palabras, secundado por Elizabeth Banks, quien delata las angustias de una mujer en prisión, dispuesta a quitarse la vida. En pequeños roles se hallan Liam Neeson, Olivia y Brian Dennehy.
Los próximos tres dÃÂas puede verse como un thriller de acción y funciona como entretenimiento para el espectador. Pero también ofrece una lectura mucho más densa sobre el tema tan discutido de la justicia aplicada fuera de las instituciones. Allàestá su fortaleza.
LOS PRÓXIMOS TRES DÃÂAS (The next three days), EEUU, 2010. Dirección y guión: Paul Haggis; basado en el film francés de Fred Cavayé “Pour elleâ€Â. Producción: Paul Haggis, Marc Missonier, Michael Nozik y Olivier Delbosc. Música: Danny Elfman. FotografÃÂa: Stephane Fontaine. Montaje: Jo Francis. Elenco: Russell Crowe, Elizabeth Banks, Liam Neeson, Brian Dennehy, RZA, Olivia Wilde, Moran Atias. Distribución: Cines Unidos.
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