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Sandra y Gerardo son el principio de una historiaque se vuelve cada vez más oscura.

Después de haber presentado dos largometrajes fundamentados en la historia de nuestra Independencia —Memorias de un soldado (2010) y Muerte en Berruecos (2018)— y de haber sido el productor y director de numerosos capítulos de la recordada serie Archivo Criminal para RCTV, Caupolicán Ovalles propone en su tercer largometrajes un thriller policial que yo prefiero llamar un film noir, pues va más allá de la acción y el suspenso. Como en la tradición francesa y norteamericana de este subgénero, la historia trabaja las pasiones humanas, los aspectos más oscuros de las conductas de sus personajes y sus conscuencias morales y éticas. Todo eso está en Hotel Providencia.

La trama gira en torno de una pareja —Sandra y Gerardo— que luego de recibir una inesperada herencia deciden comprar un pequeño hotel en Margarita, pero el negocio no funciona. La pandemia paraliza las visitas turísticas, los bancos exigen garantías, los clientes no llegan, hasta que se aparece Sergio, extraño personaje vinculado con círculos muy oscuros. Surge entonces una propuesta de erotismo, corrupción y ambición que conduce a un crimen con consecuencias no previsibles en sus relaciones con las organizaciones criminales de Miami y Bogotá. Esta es la médula de su historia.

Este relato de erotismo, traición, infidelidad y codicia se desarrolla de forma coherente, en la medida en que una relación triangular inicial se traslada a una investigación policial con ramificaciones internacionales pero con evidencias muy concretas y locales. Dos policías investigan la muerte de un narcotraficante mientras una pareja disfuncional intenta adaptarse a una situación no planificada. Más que la acción y el suspenso —que los hay— funciona el estudio de varias personalidades patológicas que pasan de la complicidad al distanciamiento y la traición.

Son fundamentales las actuaciones de Sócrates Serrano, Adelina Menéndez y Carlos Guillermo Haydon, pues conforman el impulso dramático de Hotel Providencia. Luego dan paso al sólido trabajo interpretativo de Aroldo Betancourt y Sheila Monterola como los investigadores que buscan la verdad. Los aportes de Gabriela
Vergara, Hendricks Bages, Leo Aldana,  Franlin Virgüez, Jorge Herrera y Amparo Conde completan el cuadro humano de personajes en tensión. Estos personaje construyen un relato bien estructurado que mantiene el interés del espectador.

También hay que destacar en la creación de su clima emocional la fotografía de Julio César Castro, el diseño de sonido de José Luis Poleo, el montaje de Maikel Jiménez, la música de Roberto Tarzieris y la dirección de arte de Francisco Padrón. Todos contribuyen a crear un discurso verosímil, creíble y contable. Un film noir sin estos elementos bien artculados fracasa ruidosamente.

Ovalles ha dado un giro en su filmografía que promete nuevas situaciones. Ha regresado al género criminal que manejo en su trabajo para la televisión. Y ha destacado el asunto de la ética y la coherencia en las personalidades de seres acosados por la codicia y la tentación.

HOTEL PROVINDENCIA, Venezuela, EEUU y Colombia, 2022. Direección: Caupolicán Ovalles. Guion: Anny Van Der Dys y Caupolicán Ovalles. Producción: Beatriz Aranguren, Luis Villanueva y Luis Quintero. Fotografía: Julio César Castro. Diseño de sonido: José Luis Poleo. Montaje: Maikel Jiménez. Música: Roberto Tarzieris. Dirección de Arte: Francisco Padrón. Elenco: Sócrates Serrano, Adelina Menéndez, Carlos Guillermo Haydon, Gabriela Vergara, Aroldo Betancourt, Sheila Monterola, Hendrick Bages, Leo Aldana, Franklin Virgüez, Jorge Herrera  y Amparo Conde. Distribucion: Mundo de Películas.

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