Los vínculos que establece Sergio con sus compañeros de residencia se fortalecen y le permite reflexionar no solo sobre la vida de sus nuevos amigos sino sobre sí mismo.

Curiosa película que a través de equívocos conduce al hallazgo de ciertas verdades que no siempre son cómodas. Para comenzar, se trata de un documental trabajado con ciertas técnicas de la ficción. Y con ciertas dosis de comedia, hay que añadir. El resultado es una pieza distinta que habla de la vejez y también de la soledad.

Su personaje real y principal es Sergio Chamy, un hombre solitario de 83 años que accede a ingresar a una casa de reposo de ancianos en Santiago de Chile, contratado por Rómulo Aitken, un detective privado que a su vez es contratado por una cliente que le encarga investigar si su madre es maltratada en ese lugar. Sergio se convierte en un ‘topo’ sin tener conocimiento alguno de espionaje. Debe vivir allí durante tres meses, sin revelar su identidad ni propósitos. Esa experiencia le hará descubrir y comprender muchas cosas.

Ese hombre se convierte en otro más de los ancianos de esa casa de reposo. Observa y comparte el enorme peso de la soledad, el olvido de la familia, la incertidumbre ante el futuro inmediato y la certeza de la muerte. A pesar de todos estos elementos dramáticos, El agente topo adquiere cierto tono de comedia fundamentado en la ironía y el desparpajo. Los vínculos que Sergio establece con sus compañeros de residencia se fortalecen y le permite reflexionar no solo sobre la vida de sus nuevos amigos sino sobre sí mismo.

Maite Alberdi es una documentalista chilena que se ha destacado por sus cortometrajes y por los cuatro largometrajes que ha estrenado hasta ahora: El salvavida (2011), La once (2014), Los niños (2016) y El agente topo (2020), que han ganado numerosos premios en festivales internacionales. Su último trabajo es candidato al Oscar de este año como mejor documental.

Ya infiltrado, Sergio Chamy comienza a preguntarse, por ejemplo, por qué la clienta de Rómulo Aitken nunca va a visitar a su madre. Su actitud de inquisidora le impide acercarse a esa anciana solitaria y triste. Cada uno de los habitantes de esa morada posee sus propio conflicto. Pero Alberdi rehúye el tono de denuncia y prefiere los caminos de la comprensión y la intimidad. Allí reside su fuerza expresiva, en la medida que evade lo obvio y se sumerge en mayores complejidades íntimas.

El agente topo expresa esa complejidad no solo temática sino también narrativa.Alberdi ha elaborado un discurso con técnicas propias de la ficción (plano y contraplano, por ejemplo) para observar y mostrar lo que sucede en el interior de esa casa. Podría creerse que se trata de actores pero no: son personajes reales, incluso el propio Sergio. Estos personajes representan los matices de la vida antes de la muerte próxima e inevitable. De verdad es una película muy curiosa. Disponible en Netflix.

EL AGENTE TOPO, Chile, España, EEUU, Alemania y Países Bajos, 2020. Dirección y guion: Maite Alberdi. Producción: Marcela Santibáñez. Fotografía: Pablo Valdés. Montaje: Carolina Siraqyan. Música: Vincent Van Warmerdam. Elenco: Sergio Chamy, Rómulo Aitken, Marta Olivares, Berta Ureta, Zoila González, Petronila Abarca y Rubira Olivares.

About The Author

Deja una respuesta